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miércoles, 8 de septiembre de 2010

El Miedo al Fracaso.



Por: Laura Martínez Domínguez.

El televisor que instalado oficialmente frente al diván anaranjado, ha decidido simplemente encenderse, anuncia una palabra desconocida: Atiquifobia.


El gato no está, por lo que nadie reclama que su tazón sea llenado de filosofía. La araña se escondió detrás del número seis y no esta dispuesta a salir hasta que las cosas mejoren, la mujer no sabe que cosas sean, pero ignora a la araña dado que la palabra la intrigó más de la cuenta. Además el gato no está, por lo que quizá no aparezcan autores colgados en orejas, o deliberadamente perseguidos.


El libro rosado hace semanas que permanece mudo, quizá las palabras que aparecen sean demasiado absurdas como para que él se tome la molestia en definirlas o quizá fue solo falta de tiempo, el hecho de que no todo esté incluido, el caso es que el televisor enloquecido es la fuente de definición de la palabra introducida.


“…La atiquifobia se define como un miedo persistente, anormal e injustificado a fracasar, o a cometer errores…” la mujer se pregunta si ella alguna vez ha sentido semejante cosa, el televisor anuncia comerciales y noticias de relojes 2010, “los últimos modelos a su disposición, diseños exclusivos”, el reloj despierta de su letargo, ¿Será acaso que la mujer piensa deshacerse de él? ¿Estará casada de sus horas inciertas, de sus minutos tardíos? La araña se ríe por lo bajo al seguir el pensamiento del reloj.


El televisor sigue, se han acabado los comerciales, la mujer ha regresado al canal anterior “…Si bien es cierto que la mayoría de las personas sienten en cierta medida un gran miedo ante el fracaso, en el caso de la atiquifobia se trata de un temor totalmente irracional y extremo…”, la mujer piensa en aquellas personas que la padecen y el televisor le contesta “…El llevar una vida plena es algo que resulta imposible para las personas que tienen fobias, y en este aspecto, el miedo al fracaso resulta ser una fobia especialmente paralizante, ya que quienes la padecen dejan de involucrarse en todo tipo de actividades en las que temen fracasar…”, el reloj sopesa su vocación de marcador del tiempo, quizá debió dedicarse a otra cosa y ahora por negligencia lo cambiarán por un modelo 2010, que si de la hora correctamente, es tan aterrador fracasar en lo único a lo que te has dedicado toda tu vida.


“…Es más, la atiquifobia es vinculada incluso con el miedo al éxito, ya que los fóbicos inconscientemente obstaculizan sus posibilidades. Por lo tanto, se concluye que la propia fobia puede producir aquello que causa el temor…” la araña sale de su escondite, considera que las cosas seguirán igual aunque ella se esconda, el reloj marca desconsolado el último minuto.


En tanto el gato aparece con el rostro denotando aburrimiento, asegura haber recorrido la casa completa sin encontrar un solo filósofo al cual perseguir, la vida puede llegar a ser tan miserable. La mujer no lo toma en cuenta “…Se considera que las causas de esta fobia se deben a haber convivido con padres o hermanos muy exigentes durante la infancia, o a haber sufrido vergüenza y humillación como producto de un fracaso menor…”. El gato corre a la cocina, su tazón está vacío.


El reloj escucha con atención el siguiente comentario “…Luego con el correr del tiempo y con el crecimiento de la persona y la formación de su propia personalidad, el miedo al fracaso se va haciendo cada vez más fuerte…” no hay cura posible, entre mas mueva sus manecillas, mas fuerte será el sentimiento de que será cambiado por un modelo exclusivo. La araña se enreda de nuevo en el infinito que le proporciona el número 8, pero el reloj en un alarde de exactitud la hace caer.


“…Nuestra cultura no ayuda al fóbico, debido a que hace un culto a la perfección tanto en la imagen, como en las relaciones, en la carrera, y si bien lograr la perfección es solamente una ilusión, el que padece la atiquifobia siente que no puede descansar hasta haberla alcanzado…”. La mujer piensa en si misma, en el sinsentido que suele ser el temer a aquello que no controlamos, a aquello que siempre tendremos que vivir; cambia el canal, los comerciales la aburren.


Volvemos al canal correcto “…Esta fobia suele tratarse principalmente a través de técnicas de autoayuda y de motivación, ya que la mejor manera de superarla es enfrentar aquello a lo que se le teme, sin olvidar que es necesario poder asumir un fracaso si se desea llegar a ser exitoso en la vida…”


El programa termina, el televisor sin aviso alguno se apaga, no hubo más noticias de relojes exclusivos, por lo que el reloj marca una hora incierta, olvidando con ello su temor a fracasar en su encomienda de marcar eternamente el tiempo, la araña emprende una vez más, y sin temor a fracasar, la salida del reloj en el cual quedó atrapada.


La mujer le sirve al gato una reserva de filosofía aristotélica, guardada en la alacena para aquellos momentos en que la felicidad se te escape por entre los dedos, y simplemente se sienta a desayunar, pensando en que no puede haber fracaso en la cotidianidad.


Este sábado 11 de Septiembre el tema del FiloCafé es el Miedo al Fracaso, por lo que te esperamos para que dialogues y aprendas con nosotros, en le Cairo Café ubicado en División del Norte # 504-c en punto de las 6:00pm.

Esperamos tu asistencia.