Café blanco.
Por: Zully Zambrano
Un día, el reloj marcaba la hora del café, una dama se encontraba sentada en lo que ella llamó para sí "café blanco", de pronto y sin esperarlo un joven interrumpe su profunda mirada dedicada a una esquina de dicho lugar:
Joven.- ¿Qué harás hoy por la tarde?, ¿Estas libre?
Ella.- No, tengo cita con la doctora
J.- Y eso, ¿estás bien?
E.- Se trata de un chequeo mensual, quiere ver qué tan avanzada va mi locura
J.- Y lo deteriorada qué te ves supongo
E.- En fin, dice qué la única cura es el amor
J.-¿Amor, tú? Já
E.- Por eso cambio amante cada mes, tengo qué reinventarlo, para no aburrirme. Caray!!
J.- ¿Y yo?
E.- Tú eres un amigo imaginario, cómo todos
Y por primera vez, ella recordó qué la doctora iría a visitarla a su celda.
Joven.- ¿Qué harás hoy por la tarde?, ¿Estas libre?
Ella.- No, tengo cita con la doctora
J.- Y eso, ¿estás bien?
E.- Se trata de un chequeo mensual, quiere ver qué tan avanzada va mi locura
J.- Y lo deteriorada qué te ves supongo
E.- En fin, dice qué la única cura es el amor
J.-¿Amor, tú? Já
E.- Por eso cambio amante cada mes, tengo qué reinventarlo, para no aburrirme. Caray!!
J.- ¿Y yo?
E.- Tú eres un amigo imaginario, cómo todos
Y por primera vez, ella recordó qué la doctora iría a visitarla a su celda.
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En esta ocasión, el tema del filocafé sera libre, más no por ello se deja la atenta invitación a dialogar y profundizar en los temas que se aborden durante el sábado 3 de septiembre a las seis de la tarde en el Cairo Café, Av. División del Norte 540-C. No faltes, el café y la filosofía te esperan.